Obras destacadas

Fotografía Drowning

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Fotografía A logo for America

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Fotografía Opening New Doors

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Grabado a color Weltanschauung

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Fotografía Studies on Happiness (Birds)

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Fotografía The Last Sky

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Alfredo Jaar Hasbún

Artista, arquitecto y fotógrafo

 

Formación y primeros años

Alfredo Jaar nació en Santiago de Chile en 1956. Su formación inicial combinó la arquitectura y el cine: estudió arquitectura en la Universidad de Chile y dirección de cine en el Instituto Chileno-Norteamericano de Cultura. Durante su juventud en Chile, Jaar comenzó a desarrollar su sensibilidad artística en un contexto de represión política bajo la dictadura de Pinochet, lo cual marcó profundamente su perspectiva crítica. Su primer gran proyecto, Estudios sobre la felicidad (1979–1981), ya abordaba las tensiones entre lo público y lo privado, y fue mal recibido por los sectores dominantes del arte chileno, lo que influyó en su decisión de emigrar en 1982. Jaar se trasladó a Nueva York, donde encontró un entorno más abierto para explorar sus inquietudes artísticas, políticas y sociales.

Trayectoria internacional

Desde Nueva York, Jaar consolidó una carrera internacional que lo llevó a participar en las bienales más importantes del mundo. Su obra, interdisciplinaria, combina instalación, fotografía, arquitectura y textos, abordando temas como la injusticia social, la indiferencia ante el sufrimiento humano y la manipulación de los medios. En 1985, obtuvo la Beca Guggenheim, y al año siguiente presentó Gold in the Morning en la Bienal de Venecia, obra que documentaba la explotación en minas de oro en Brasil. Esta pieza ya mostraba su estilo: una denuncia visual y conceptual que no buscaba sólo representar, sino cuestionar profundamente.

Uno de sus trabajos más emblemáticos es El Proyecto Ruanda (1994–2000), una serie de obras que surgió como respuesta al genocidio ruandés de 1994. Jaar se propuso enfrentar la escasa cobertura mediática occidental del conflicto y la invisibilización de las víctimas africanas. A través de fotografías, instalaciones y documentos, este proyecto generó un intenso debate sobre los límites de la representación del horror y la ética de la imagen.

Además, participó en exposiciones como la Documenta de Kassel, y bienales en São Paulo, Johannesburgo, Estambul, Gwangju y otras, convirtiéndose en uno de los artistas latinoamericanos más influyentes a nivel global. Su obra también ha sido expuesta en museos como el MoMA y el Guggenheim en Nueva York, el Centro Georges Pompidou en París y la Tate Modern en Londres.

Pensamiento y enfoque artístico

Jaar se define como un artista en resistencia. Influido por pensadores como Antonio Gramsci, considera que el arte no puede ser neutral y que debe adoptar una postura crítica frente a las estructuras de poder. En su visión, la fotografía y la imagen son herramientas políticas que no sólo muestran, sino que configuran una forma de ver y comprender el mundo. Su estilo conceptual y comprometido se basa en lo que él llama "arte como acto de conciencia", una forma de intervención que busca generar reflexión más que ofrecer respuestas.

Su proceso artístico es lento y meticuloso. A menudo investiga profundamente los contextos en los que se basa su obra, viajando a lugares afectados por conflictos o injusticias. Esta investigación se traduce en instalaciones cuidadosamente diseñadas que apelan tanto a lo racional como a lo emocional del espectador. Jaar también ha desarrollado trabajos que cuestionan el rol de los medios de comunicación y la capacidad de las imágenes para representar la realidad, haciendo énfasis en el silencio, la omisión y lo que no se muestra.

Un ejemplo de esta preocupación es su obra Lament of the Images (2002), donde reflexiona sobre el control de la información visual y el acceso desigual al conocimiento visual en el mundo contemporáneo. Para Jaar, cada imagen debe enfrentarse a la posibilidad de no ser suficiente, de fallar en su intento de comunicar lo inhumano, lo insoportable.

Reconocimientos y legado

A lo largo de su carrera, Alfredo Jaar ha sido ampliamente reconocido por su contribución al arte contemporáneo y su compromiso ético. Entre sus múltiples distinciones destacan la Beca MacArthur (2000), el Premio Nacional de Artes Plásticas de Chile (2013), el Premio Internacional de Fotografía de la Fundación Hasselblad (2020) y el Konex Mercosur de Platino (2022). En 2021, fue investido Doctor Honoris Causa por la Universidad de Chile.

Además de su trabajo artístico, Jaar ha tenido un rol destacado como educador y conferencista en universidades y foros internacionales, promoviendo una reflexión crítica sobre el papel del arte en la sociedad. Ha inspirado a generaciones de artistas y activistas en América Latina y en el mundo.

Su legado no se limita a la producción artística; también se extiende a su visión del arte como herramienta de transformación social. En un tiempo donde la sobreabundancia de imágenes puede llevar a la indiferencia, Jaar insiste en la responsabilidad del artista de confrontar al espectador con lo que normalmente se omite o se ignora. Su obra es, en última instancia, un llamado a mirar con atención, a pensar críticamente y a no olvidar.